La terapia de integración sensorial ofrece un entorno de juego, supervisado por un profesional quien facilita superar nuevos desafíos, ejercitar y madurar su potencial y adquirir nuevas habilidades y aprendizajes acordes a sus necesidades.
Si existe un Déficit en el Procesamiento Sensorial (DPS) analizamos cómo el niño Procesa la información táctil, propioceptiva, vestibular, entre otras, cómo Modula la cantidad y calidad de información relevante y cómo Discrimina, es decir, organiza y analiza la información sensorial; y facilitamos el incremento de respuestas adaptadas a las demandas del entorno y la actividad.
En CENTIR el niño explora sus posibilidades, resuelve problemas y gana confianza en si mismo a través de sus propias elecciones. El profesional procura su bienestar emocional y crecimiento personal en todas las áreas del desarrollo.